Manzano: El ilusionista
Del 23 de Diciembre al 1 Enero y Del 25 de Junio al 4 de Julio
Los celtas nos han enseñado que el manzano es un árbol que no es, en absoluto, lo que parece ser. Algo que nos ocurre con muchas personas. Y que nos ocurre más a menudo con los nacidos bajo el signo del manzano.
Podríamos decir que los manzano son los que crearon ese lema de Nunca hay que juzgar un libro por su cubierta. Viven una vida que sólo en apariencia promedio, pero llevan en su interior pasiones ardientes y complejos universos, de una veta creativa inagotable.
Esta vida interior les permite adaptarse con facilidad a la mayoría de las situaciones de la vida. Son curiosos por naturaleza, y gozan de un gran interés por una amplia gama de temas. Son excelentes oyentes, y es habitual que sus personas cercanas les busquen como confidentes y como una salida para liberar sus cargas.
Tienen un amplio sentido del humor, y un claro sentido de la ironía que usan para transmitir sus enseñanzas sobre la vida. Tienden a ver el cuadro completo antes que el vaso medio vacío, y aplican su visión increíble para resolver todo tipo de problemas.
Durante el mes de junio, el manzano se encuentra en su mejor momento, cubierto por hermosas flores… pero se encuentran enclavados firmemente entre espinas. Aquí es donde se nos revela esa naturaleza contradictoria de este árbol.
Como grandes herbolarios y botánicos, los antiguos celtas comprendieron el valor medicinal de las hojas superiores del manzano y de sus flores. Consideraban mal presagio llevar sus ramas dentro de la casa. Esto se debía, al parecer, al hecho de que el olor de las ramas de manzano cortadas es muy parecido a la carne en descomposición. De nuevo las asociaciones entre dos sentidos opuestos: la vida y la muerte como aspectos de la vida.
El manzano está fuertemente impregnado de energía masculina, y por ello se le reconoce como un símbolo de la fertilidad. A pesas de este matiz masculino, también se la ha asociado con aspectos femeninos como la diosa madre, la doncella y la anciana. Es muy común que el cayado de brujas y hechiceros esté realizado en una gran veta de manzano.
¿Qué sentido tienen todas las contradicciones que alberga el manzano? Es un testimonio de cómo nuestras dualidades pueden complementarse perfectamente, una perfecta representación del concepto del yin y el yang.
Los celtas entendían cabalmente el poder del equilibrio: sabían que toda magia nace del encuentro entre opuestos, que anulan sus fuerzas encontradas y crean una tercera vía.
Los nacidos bajo la sombra del manzano son ejemplo de esta diversidad y dualidad. Son el fruto de la unión perfecta de los opuestos.
Sus signos más compatibles: Abeto y Serbal.